Este innovador desarrollo, que ha contado con la participación de un equipo multidisciplinar compuesto por expertos ingenieros, médicos y fisioterapeutas, será totalmente adaptable a las necesidades del paciente, proporcionando un apoyo global e integral en la movilidad de sus miembros, a través de módulos flexibles.
A diferencia de anteriores prototipos de exoesqueletos, en este caso los investigadores implantan actuadores que permiten usar control inteligente de fibras de materiales con memoria de forma, y así dar un salto cualitativo sustancial en nuevos desarrollos específicos para rehabilitación y la asistencia, superando las tres grandes limitaciones de los diseños actuales, que dificultaba su aplicación y generaban rechazo en personas mayores: el peso, el tamaño y la rigidez.
El exoesqueleto, que se encuentra en última fase de desarrollo, pesa en torno a un 70 % menos con respecto a la media de dispositivos existentes, gracias al reemplazo de motores por materiales innovadores basados en fibras de SMA, lo que, además, logra que no sea invasivo y no genere rechazo de apariencia.
Actualmente, un gran número de enfermedades y trastornos musculoesqueléticos y neurológicos derivan en la pérdida total o parcial de la movilidad de algunos miembros. A ello hay que sumar el papel fundamental que las extremidades superiores e inferiores del cuerpo juegan en la relación del ser humano con su entorno, siendo las tareas de manipulación o la posibilidad de caminar de enorme importancia en la vida diaria. Dichas limitaciones, al afectar a un amplio sector de la población perjudicado por lesiones, incapacitado o que precisa de asistencia tecnológica para compensar sus carencias funcionales, convierten en necesaria y urgente la investigación y desarrollo de nuevos procedimientos y dispositivos robóticos eficientes que se apliquen durante los periodos de rehabilitación, como este novedoso exoesqueleto: una solución tecnológica que contribuye a un envejecimiento saludable activo de la población, que aumenta la independencia de las personas mayores y les facilita la ejecución de tareas cotidianas, contribuyendo a paliar la pérdida de movilidad.
Además de prevenir la aparición de desórdenes musculoesqueléticos, tratar la pérdida ósea y atacar la atrofia muscular, este sistema permite durante la rehabilitación a los pacientes el autotratamiento gracias al empleo de robótica asistencial, contribuyendo al envejecimiento saludable y facilitando el trabajo de los cuidadores, así como la comunicación con plataformas abiertas que facilitan el trabajo de los cuidadores y les proporciona retroalimentación sobre estado de salud del usuario, promoviendo su rehabilitación.
Este proyecto busca no solo el desarrollo de nuevos dispositivos de rehabilitación basados en músculos artificiales, sino su integración final. Aunque cada módulo es independiente en cuanto a su actuación y aplicación, sí se considera desarrollar un sistema de control y de alimentación conjunto, de forma que pueda rehabilitar varias dolencias al mismo tiempo o combinar terapias específicas. De esta manera, se conectarán y controlarán los diferentes elementos del exoesqueleto desde un único punto, permitiendo esta integración tratar varias lesiones en el mismo paciente de manera simultánea, de mano y muñeca, codo, rodilla y tobillo.
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