Hacer actividad física constituye un componente esencial para mantener un modo de vida saludable a cualquier edad, sin embargo, es crucialmente relevante el ejercicio físico en personas mayores. Conforme se envejece, se producen variaciones en el cuerpo que pueden perjudicar la flexibilidad, la vitalidad y el bienestar en general. A pesar de ello, la práctica de ejercicio físico, bajo supervisión de especialistas en salud, se transforma en un recurso fundamental para contrarrestar estas consecuencias.
Emergiendo como esencial en la promoción de un envejecimiento activo y saludable en los centros residenciales, el fisioterapeuta se convierte en una figura destacada. Este profesional, con experiencia en el movimiento y la función del cuerpo humano, tiene un rol vital en el cuidado y bienestar de los residentes al diseñar un plan de tratamiento adaptado a sus capacidades físicas, funcionales y cognitivas. A través de la definición de objetivos a corto, mediano o largo plazo, se busca fomentar el ejercicio y la movilidad, la rehabilitación física y la prevención de lesiones.
Beneficios de la actividad física
- Una de las causas principales de lesiones en las personas mayores es la prevención de caídas. En este sentido, se está trabajando en mejorar el equilibrio, la fuerza y la coordinación de los residentes para así reducir el riesgo de caídas.
- La movilidad se ve afectada por diversas condiciones médicas a medida que envejecemos, y los fisioterapeutas están allí para ayudar a mantener o mejorar la movilidad de los residentes a través de ejercicios específicos y terapias personalizadas.
- Después de una cirugía o una enfermedad, es esencial la rehabilitación para recuperar la función y la independencia. En consecuencia, se están diseñando programas de rehabilitación adaptados a las necesidades individuales de cada residente.
- Muchas personas mayores sufren de dolor crónico debido a enfermedades como la artritis. Por ende, los profesionales de la salud especializados en este campo emplean técnicas como la terapia manual, la electroterapia y ejercicios terapéuticos para aliviar el dolor.
Fomentar la independencia
Si bien, la influencia positiva de la fisioterapia es clara, como lo respalda Àlex Álamos, especialista en fisioterapia de CleceVitam Daurada: “El impacto de la fisioterapia en la calidad de vida de los adultos mayores es notable. Por ejemplo, un residente con una fractura de cadera puede recobrar su movilidad y autonomía gracias a un plan de rehabilitación bien estructurado. Otro con artritis grave puede experimentar una reducción significativa del dolor y una mejora en sus capacidades para realizar actividades cotidianas”, detalla.
La promoción del entrenamiento dirigido beneficia la condición física y favorece el mantenimiento y la recuperación de la fuerza muscular, la flexibilidad y el equilibrio. Todo esto resulta esencial para evitar ciertas lesiones previamente referidas, como los accidentes. Asimismo, la actividad física periódica también colabora en el control de padecimientos crónicos tales como la diabetes, la hipertensión y las afecciones cardiovasculares.
Simplemente salir a caminar todos los días puede influir considerablemente en la salud del corazón y músculos de los adultos mayores. La práctica de actividades suaves, como el yoga o la respiración, no solo disminuye el estrés, sino que se ajusta a personas con limitaciones de movilidad, beneficiando tanto la salud física como mental.
Promovemos en CleceVitam Daurada una amplia variedad de ventajas para las personas mayores, que van desde la mejora de su estado físico y mental hasta estimular la socialización y autonomía, permitiendo a los usuarios mantenerse activos y disfrutar de una vida de mayor calidad y saludable. Por consiguiente, consideramos en la entidad que el papel del fisioterapeuta es crucial para fomentar la prevención de caídas, conservar la movilidad, llevar a cabo la rehabilitación y controlar el dolor de nuestros usuarios.