Castilla-La Mancha recupera la normalidad en visitas y salidas en las residencias

Castilla-La Mancha ha aprobado una nueva resolución de medidas para las residencias, servicios y establecimientos de Servicios Sociales que devuelven la normalidad a estos recursos en el régimen de visitas, salidas y entradas de las personas usuarias.

Así lo ha anunciado la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano: “Las restricciones que se vienen manteniendo en centros residenciales para personas mayores, van a desaparecer” para volver a la “tan ansiada normalidad”.
 
“Confiamos en que estas medidas, que se han tenido que establecer para combatir esta sexta ola, estén siendo el reflejo de los resultados que ahora estamos teniendo, puesto que consideramos que, en gran parte, han ayudado a poder limitar y contener los contagios en los centros residenciales y, por tanto, así poder proteger a las personas mayores”, ha aseverado García Torijano.
 

Nuevas medidas en las residencias de mayores

La actualización de las medidas será mediante una nueva resolución que publique la Consejería de Sanidad en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha y que venga a reemplazar a la que, hasta hoy, jueves 17 de febrero, está todavía en vigor.
 
Unas nuevas medidas que “principalmente hacen hincapié en las medidas que afectaban a la movilidad de los mayores y visitas”, según ha explicado la consejera, quien ha añadido que “se retoman con total normalidad.
 
Aunque, ha matizado que “si esas salidas son prolongadas, se recomienda que se reingrese con una prueba diagnóstica o que se la hagan en el mismo centro”.
 
Por último, la consejera de Bienestar Social ha señalado que es importante mantener las mismas garantías y seguridad que hasta ahora “con medidas preventivas que todos conocemos como la higiene, la ventilación y el uso de mascarilla en interiores”, así como siguiendo las pautas que cada centro tiene marcadas en sus Planes de Contingencia.

Llamamiento a la vacunación

Además, Bárbara García Torijano ha hecho un llamamiento tanto a las personas mayores, vulnerables, como a profesionales que les atienden a ponerse la vacuna o completar su pauta de vacunación porque “se ha visto en toda la sociedad, pero especialmente en las residencias, la importancia de que se pongan la vacuna para que sus usuarios estén realmente protegidos”.