Fundación Pilares para la Autonomía Personal ha entregado hoy sus IV Premios a las mejores Buenas Prácticas relacionadas con el Modelo de Atención Integral y Centrada en la Persona (AICP), desde el que se propugna el buen trato a las personas mayores y personas con discapacidad y se prestan apoyos para que, pese a necesitar atención permanente, puedan seguir siendo las protagonistas de su vida y la conduzcan manteniendo su autonomía y dignidad.
El jurado ha premiado a cinco buenas prácticas, una buena práctica relacionada con la COVID y dos menciones especiales. También se ha otorgado el premio popular, seleccionado a través de una votación popular a QResi; y, por último, al mejor relato en primera persona de la Covid-19.
En su discurso inaugural, la presidenta de Fundación Pilares, Pilar Rodríguez, ha señalado que la Fundación Pilares, desde el inicio de su andadura, “se propuso trabajar por los derechos y la dignidad de las personas, desde la generación de conocimiento, investigando y con prácticas como las que construyen esta comunidad de aprendizaje que es la #RedBBPP».
Buenas prácticas seleccionadas
- Premio al Instituto de Trabajo Social y Servicios Sociales, INTRESS por su programa “La atención Integral y Centrada en la Persona, en casa también”. El jurado valoró la innovación de un programa que combina diversos recursos para conseguir la continuidad de la atención personalizada, tanto en los centros como en el domicilio y con la colaboración de las familias.
- Premio al Ayuntamiento de Avilés por su “Programa dirigido a personas mayores de 90 años que viven solas”. Se destaca por el Jurado la relevancia de un programa que pretende detectar a tiempo para intervenir de manera personalizada las situaciones de soledad de las personas de más avanzada edad.
- Premio al Ayuntamiento de Vitoria por el Programa «Activa tu barrio«, que realiza un excelente trabajo comunitario con la participación de los agentes y tiendas del barrio, todo ello liderado por las propias personas mayores.
- Premio especial COVID19 al Centro de Referencia Estatal de Atención al Daño Cerebral (CEADAC), por el buen trabajo realizado de coordinación con el Hospital La Paz, por una parte, y por haber atendido a las personas enfermas bajo el enfoque de la atención centrada en la persona, por otra parte.
- Premio del jurado al Ayuntamiento de Barcelona por su proyecto “Superilles sociales”, programa considerado unanimemente por el jurado como ejemplar por la necesidad existente de mejorar el sistema de atención domiciliaria. Con este programa, se resuelven muchos de los problemas detectados en el SAD tradicional: rotación de trabajadoras familiares, discontinuidad, poca adaptación a las necesidades reales de las personas.
- Premio a la Fundación Argia por su Programa «Construcción colectiva de un club social como espacio para la recuperación de personas con enfermedad mental», habiéndose valorado por el Jurado el trabajo constructivo y continuado de varios años para mejorar la participación de las propias personas en su propio proceso.
Durante la ceremonia también se hizo entrega del “Premio más Popular”, a la QResi, ganador de la votación online con 1.441 votos. Y de dos menciones especiales a:
- La Sociedad Española de Geratría y Gerantología por su programa “Imagen y envejecimiento”. Esta iniciativa lleva nutriendo la red muchos años. Y lo hace desde la reflexión y la interdisciplinariedad, con el objetivo de eliminar estereotipos y difundir la heterogeneidad de las personas mayores.
- La buena práctica “Cuidadores de Mayores: situación actual ante la Ley de Dependencia y evaluación de programas destinados a cuidadores/as”, de la Departamento de Análisis Social e Instituto Universitario de Estudios de Género, Universidad Carlos III de Madrid. Se caracteriza por su rigor científico, universidad implicada, perspectiva de género en los cuidados, por su alta feminización (quien los presta y quien los recibe). También analizan los cuidados que dispensan las familias cuidadoras y los programas que existen para su formación y apoyo
En la clausura del acto, Luis Barriga, director general del Imserso, ha ofrecido unas palabras: “Escuchando todas las buenas prácticas me doy cuenta de que tienen en común que todas ellas mejoran la vida de las personas, que permiten que cada uno de nosotros sea nuestro propio relato vital”.